Caracterizado por el prodigio de la naturaleza, el Parque Nacional "Miguel y Hidalgo y Costilla", mejor conocido como "La Marquesa", constituye uno de los atractivos más importantes y concurridos del Estado; durante todo el año y en especial los fines de semana, recibe a miles de visitantes que acuden a realizar diversas y agradables actividades al aire libre.
A la mitad del camino entre la ciudad de México y Toluca se encuentra esta zona boscosa, cuyo ecosistema es muy importante por sus bosquees, valles, peñascos, pastizales, arroyos y montañas de alturas diversas, algunas de las cuales llegan a alcanzar los cuatro mil metros sobre el nivel del mar.
Este fue nuestro destino este fin de semana que para nosotros (demos gracias al "Señor") fue un finde largo.
A tan solo 40 minutos de D.F. (Distrito Federal, digamos un Capital Federal para los amigos) se encuentra la Marquesa, un lugar hermoso rodeado de una vegetación imponente, donde se pueden realizar numerosas actividades: rapel, cabalgatas, karting, andar en moto, kayak entre otras.
Nos tocó un día realmente heeeerrrmoso pero con un frío glaciar ártico. Igualmente el frío no impidió que pasáramos un excelente día con amigos, tomando un rico café de olla (como su nombre lo indica hecho en una olla de barro y canela) y algunos tacos y quesadillas de todo tipo.
Entre los mexicanos la muerte tiene un sentido singular. A veces aparece como una arraigada tradición que hinca sus profundas tradiciones en el pasado indígena; en otras ocasiones parece un escenario donde se mueven y deslizan figuras del recuerdo, objetos de ofrendas de las más diversas índole.
Dulces, pan, flores, alimentos y costumbristas. La tradición, de alguna manera es permanente, pero aparece con mayor vigor y con un sentimiento espontáneo los días 1 y 2 de noviembre de cada año.
La ofrenda y las visitas
Se cree que las almas de los niños regresan de visita el día primero de noviembre y las almas de los adultos regresan el día dos de noviembre. En el caso de que no se pueda visitar la tumba, ya sea porque ya no existe o porque la familia está my lejos para ir a visitarla, se elaboran detalladas ofrendas en las casas, que pueden ser platillos de comida, pan de muerto, vasos de agua, mezcal, tequila, pulque o atole, cigarrillos e incluso juguetes para las almas de los niños. Todo esto se coloca junto a los retratos de los difuntos rodeados de veladoras.
Las personas velan durante la noche en la tumba esperando que el espíritu de su muerto baje y disfrute de sus ofrendas.
Esta celebración es distinta en otros lugares, por ejemplo en Oaxaca se realizan alfombras enormes hechas de flores a lo largo de las calles principales que representan un verdadero trabajo artesanal de la gente. En otros lugares grupos étnicos realizan ritos como sus antepasados, para venerar a los muertos.
Según la tradición, el altar (para el difunto) debe constar de 7 niveles o escalones que representan las 7 etapas que tiene que pasar el alma de un muerto para poder descansar. Cada escalón tiene un significado y debe contener ciertos objetos específicos:
Primer escalón:
Se coloca la foto del santo o virgen de la devoción.
Segundo escalón:
Es para las ánimas del purgatorio
Tercer escalón:
Se pone sal para los niños del purgatorio.
Cuarto escalón:
Se coloca pan llamado "pan de muerto". Este pan es adornado con azúcar roja que simula la sangre, se recomienda que el pan sea hecho por los parientes del difunto ya que es una consagración.
Quinto escalón:
Se coloca la comida y la fruta que fueron los preferidos por el difunto.
Sexto escalón:
Se coloca la foto del difunto a quien se dedica el altar.
Séptimo escalón:
Se coloca la cruz de un rosario hecho de tejocote y limas.
En el altar se colocan ofrendas, se prenden 4 velas principales formando una cruz orientada a los cuatro puntos cardinales, al lado del altar se pone una olla de barro sobre un anafe con hierbas aromáticas: albahaca, laural, romero, manzanilla y otras más.
Para conocer aún más sobre esta tradición y la explicación de cada uno de los elementos de un altar de muertos haz click aquí
Ese mismo fin de semana fuimos a una exposición de "altares de muertos" que se realizó sobre la avenida Paseo de la Reforma. Allí se exponían varios altares realizados por diferentes colonias y entidades de MX.
Luego de casí dos meses de venir planeando esta salida finalmente lo logramos y el sábado por la mañana, de la Mano de Marisol (compañera de trabajo de Maru) y su hermana Luisa, emprendimos camino al parque de diversiones conocido como SIX FLAGS.
Six Flags, Inc. es la mayor compañía regional de parques temáticos del mundo, con 21 parques en los EE.UU., México y Canadá. Fundada en 1961, Six Flags ofrece entretenimiento en todo el mundo a millones de familias gracias a sus montañas rusas de vanguardia que rompen todos los récords y programas especiales con eventos tales como las populares Series de Conciertos Nocturnos de Jueves y Domingo.
Desde las 11 de la mañana hasta las 6 de la tarde estuvimos recorriendo todo el parque intentando subir a la mayor cantidad de juegos posibles. El parque está dividido igual que Disneylandia, por pueblos, cada uno de ellos tiene sus propios juegos y se encuentran ambientados de acuerdo al tipo de pueblo. Los pueblos son 5: Pueblo Méxicano, Pueblo Vaquero, Pueblo Suizo, Hollywood, Pueblo Polinesio y Pueblo Francés.
Cada uno de los pueblos tiene tiendas de regalos y restaurantes que varían sus comidas de acuerdo al estilo del pueblo. Cuando uno cambia de pueblo tiene un cartel que lo recibe y es muy notoria la diferencia. La ambientación esta muy bien lograda, teniendo en cuenta cada pequeño detalle para hacer realmente que uno se sienta inmerso y parte del lugar.
La cantidad de atracciones que tiene el parque es tal que uno no llega a recorerlas todas, dado que las filas para subirse a cada juego son aprox de 30 minutos (teniendo en cuenta que fuimos un día en que el parque no estaba realmente lleno)
Las atracciones a destacar:
- Superman: El último escape
Una de las montañas rusas más grande y rápida del mundo, en un viaje a más de 120 km./hr con una caída de 66 m.. de altura, giros a velocidades impresionantes en un recorrido de 1708 m. de longitud.
Ambientada como si estuvieras en el díario el Planeta, pasamos por todas las oficinas del diario (incluyendo la de Clark Kent y Luisa Lane) hasta llegar a la fila para subir al juego.
- Batman: The Ride
La única montaña rusa suspendida en México! Disfruta del recorrido más excitante donde tus sentidos no podrán creer la sensación provocada por los giros inesperados y la velocidad extrema en un asiento donde tus pies flotan libremente.
- Medusa
La Medusa te congelará de emoción cuando seas víctima de sus vertiginosas caídas y una velocidad de 80 km./hr en un recorrido de un kilómetro que hará vibrar todos tus sentidos. Se encuentra localizada en el Pueblo Vaquero donde se muestra orgullosa como la montaña rusa de madera más grande de América Latina y se ha consolidado como una de las atracciones obligadas en Six Flags México.
- Kilahuea (conocida por nosotros como Free Fall o Caída libre)
El juego realiza un disparo de abajo hacia arriba el cual impulsa al visitante hasta su altura máxima. Posteriormente el disparo es realizado de arriba hacia abajo desarrollando una sensación mayor a una caída libre (60 metros)
Esos son algunos de los juegos por donde pasamos en Six Flags, pero para que tengan una mejor idea tenemos listo el 3er episodio de Peñaloza TV para mostrarlo.
Sábado 7.30hs - Sí bien tempranito comenzamos el fin de semana pasado para disfrutar de un fin de semana en Cuautla (“Arboleda o bosque” ó "Lugar de águilas"). Su nombre en lengua náhuatl “Kuahtlán" significa Arboleda o bosque. Ubicado en la zona oriente del Estado a una altura de 1.300 m. sobre el nivel del mar. Limita al oeste con Yautepec, al norte con Atlatlahucan, al este conYecapixtla y al sur con Ciudad de Ayala. Esta invitación fue cortesía de nuestra amiguita Gaby quien nos dijo si queríamos compartir un fin de semana con su familia y de paso conocerla.
Que podemos contarles, la verdad que Gaby tiene una familia hermosa, en todo momento nos hicieron sentir muy cómodos, como si los conociéramos de toda la vida.
Luego de casi 3 horas de viaje finalmente llegamos a nuestro destino en Cuautla, la casa del tío "Pancho" y la tía Vero, anfitriones y dueños de la casa. La casa ubicada en el corazón de un barrio privado tenía todo lo necesario para pasar un excelente fin de semana: pileta (alberca), cancha de basquet-voley, un parque enorme, una glorieta, la parrillita y por sobre todo buena onda y una excelente compañía. En total eramos aproximadamente unas 15 personas en la casa, entre adultos y niños.
Recibidos con unas muy buenas hamburguesas preparadas por el tío "Pancho", una tarde de birras (chelas), juegos de cartas y pileta completaron el día sábado. Finalizando con algunos jueguitos de rudeza extema como fue "el nudo" , juego donde se colocan todos los participantes en ronda agarrados de las manos y deben cruzarse de un lado a otro sin soltarse de las manos, intentando enredarse hasta el punto de no poder volver para atrás. Pierde quien por tensión, cansancio o risa se suelta, a quien perseguirán y se les tirarán todos encima como si fuera un partido de rugby.
El día domingo nos recibió desde bien temprano en la mañana (9hs) desayunando al mejor estilo americano unos huevos revueltos con jamón y tomate, pan, café y jugo de naranja.
El domingo quien tuvo el honor de agasajar a la familia fui yo preparando un asadito al mejor estilo argento con 3 cortes enteros de arrachera (corte mexicano similar a la entraña). Que más contarles, la verdad que pasamos un fin de semana espectacular y no nos olvidaremos de esa frase que salió al momento del brindis del día domingo: "bienvenidos a la familia". Queremos agradecele a Gaby y Eri y a toda su familia por habernos invitado y demostrarnos tanto cariño como sentimos durante estos dos días, se puede decir que pudimos sentir la "cortesía mexicana" al 100%.
En serio MUCHAS GRACIAS y los queremos todos los días un poco más y sin control® (derechos reservados para Gaby por esta frase)
Los dejamos con algunas fotillos de este fin de semana Cuautlense.
...o Paintball, nada más que en México se lo conoce como GOTCHA, expresión norteamericana que significa "te tengo" o "te atrapé".
El Paintball es el deporte con mayor auge en todo el mundo. Es un deporte de aire libre (también hay Indoors) dónde se combina el ejercicio, el contacto con la naturaleza, estrategia, juego en equipo y sobre todo la descarga de adrenalina y el buen humor.
Generalmente se juega con 2 equipos de unas 7 personas cada uno, que van equipadas con una máscara protectora y una marcadora alimentada por CO2 o aire comprimido. Estas marcadoras disparan bolas de "pintura" que al impactar se rompen, dejando una mancha. Esta "pintura" es totalmente biodegradable, no tóxica y lavable. (!!! basta con mojarlas con agua y desaparecen !!!)
Las bolas están hechas con una cubierta de gelatina (como las cápsulas de los medicamentos) y rellenas de colorante alimenticio.
A eso fuimos a jugar el sábado al medio día con nuestro nuevo grupito de amigos, y de paso a festejar el cumpleaños de Alan, el hermano de Erika, junto con algunos de sus amigos.
En total fuimos 11 personas, 5 chavas y 6 chavos, listos para pasar un buen rato en el campo de batalla.
3 campos de juegos diferentes, dos de ellos en el medio del bosque, con varios obstaculos, tachos y maderas para usar de protección, desniveles y un colectivo viejo con maderas en las ventanas que servía como bunquer. El otro, una cancha más rápida de juego, donde no tenías demasiada distancia entre un equipo y otro, solo quedaba la táctica y no dejar respirar al enemigo.
La disposición de los equipos: Los más viejos (experiencia) vs los más jóvenes (energía). Así lo decidió el cumpleañero. Pero lo que no se esperaban es que en el grupo de los "viejos" se encontraba un ex NAVY SEAL conocido como el "Chacho" Peñaloza, dispuesto a entregar su vida por sobre la de sus compañeros de equipo para lograr conseguir el objetivo común: la VICTORIA.
Jajaja, la verdad es que para muchos era la primera vez que jugaban, los que más experiencia tenían era porque solo habían jugado una vez anteriormente. Pero estuvo realmente muy pero muy bueno, pasamos una tarde excelente, entre sudor, adrenalina, cansancio y moretones. Si, moretones, los impactos de las balas de pintura sobre el cuerpo son tan fuertes que dejan sus lindos moretones, es por eso que no es recomendable disparar a una distancia menor a 10 mtrs, utilizar una máscara (obligatoria) y un chaleco que te proporcionan en el lugar de juego.
2 horas y media de juego, buen tiempo y amigos, la combinación perfecta para pasar un sábado en la tarde. Después de eso, corrimos a comprar una de las mejores hamburguesas asadas que haya probado hasta el momento en México (a todo esto les estoy hablando que terminamos comiendo a las 4 de la tarde)
Saludamos a todo el equipo de GOTCHA del sábado, esperemos que se repita o que lo tomemos como rutina de todos los meses.
Los dejamos con un poquito de historia y algunas imágenes. Fin de la transmisión.
¿Cómo comenzó el Paintball?
El Paintball nace en 1.981 en New Hampshire, U.S.A. Los creadores del Paintball fueron Bob Gurnsey, Hayes Noel y Charles Gaines que se les ocurrió la idea tras ver unas pistolas que disparaban bolas de pintura (pintura de verdad) accionadas por CO2 para marcar árboles y ganado. La primera partida de Paintball se jugó en Junio de 1.981 con pistolas Nel-spot 007s.
Desde entonces el Paintball fue desarrollándose siendo creado el primer campo de Paintball al aire libre en 1.982 en Rochester, N.Y.
Siii chicos y chicas llegó la segunda entrega de Peñaloza TV, hoy desde las pirámides del Sol y de la Luna en Teotihuacan: "Ciudad de los Dioses".
Teotihuacan es una palabra Nahuatl (el idioma azteca) que quiere decir "la ciudad donde los hombres proceden de los Dioses".
Luego de 2 horas y media de viaje debido a que el tráfico estaba realmente terrible arribamos finalmente a las tan deseadas pirámides. En esta ocasión nos acompañaron Tía Gaby, Marco y Angela (invitada directamente desde las Islas Canarias).
La inmensidad del lugar es impresionante, se puede sentir una paz y una energía como no se puede imaginar. Ver esos colosos de piedras e imaginarse que fueron levantados con el sudor de miles de hombres, sin máquinas ni tecnología es realmente increible.
Pudimos subir a la pirámide del Sol (con una altura de 64 mtrs y la mayor de las dos) desde donde se puede apreciar en su total extensión la zona arqueológica donde se encuentran las pirámides.
Los dejamos con el episodio II de PTV donde podrán apreciar junto con nosotros La Ciudad de los DIOSES. A pedido del público este capítulo cuenta con presencia femenina internacional.
Un poco de historia
En Teotihuacan (a 130 km aprox. del DF) se encuentran las ruinas de una civilización agrícola que se estableció hace unos 600 años antes de Cristo. Quinientos años más tarde ya se había consolidado aquella cultura y comenzaron a edificar las impresionantes pirámides y templos que aun podemos ver.
Dicen que en Teotihuacán habitaron los más exquisitos artistas de la antigüedad prehispánica, quienes legaron a los pobladores de las llanuras del anáhuac: las culturas Nahuas, los Toltecas o probablemente los Olmecas: el más impresionante centro de culto de la era precolombina en México y en el mundo. El aspecto que destaca son los exóticos y sabrosos platillos que ahí se preparan como los tlapiques o tamales hechos con tripas de pollo o de pescado y el chito o carne de burro frita y enchilada.
En sus años de mayor esplendor Teotihuacan llegó a ocupar un área de unos 18 kilómetros cuadrados con una población de unos 200 mil habitantes. Algunos especialistas y arqueólogos indican que fueron las invasiones de las culturas del norte, tal vez los otomíes o tal vez los toltecas, con su carácter guerrero quienes dieron fin a la civilización teotihuanaca. Cuentan que en la punta de la pirámide del sol se encuentra incrustada una piedra que proporciona al visitante energía.
Lo cierto es que tal como Mesopotania y después Grecia crearon los cauces por donde se desenvuelve la civilización occidental, Teotihuacan al menos recompiló, la cultura y creencias que después serían la base de las culturas posteriores en Mesoamérica. Luego de un recorrido por la zona arqueológica es posible subir a las dos pirámides mayores, la del Sol y la de la Luna.
El domingo también fue día de paseo y fuimos con nuestra gran amiga "Tía Gaby" a compartir un almuerzo con ella y su familia al Mercado de Tepotzotlán.
Un mercado abarrotado de gente por todas partes, sentadas alrededor de las cocineras que te preparan diferentes bocadillos, principalmente tortillas. La pasamos super chido (la traducción sería muy bien) la verdad que tiene una familia increible!!! Después de haber comido hasta más no poder recorrimos la feria y el museo del convento.
Un poquito de historia
Tepotzotlán en un pueblito a las afueras de DF a unos 30 minutos de distancia, perdido en el tiempo, con calles de adoquin, una feria del estilo de la que se lleva a cabo en Plaza Francia en Argentina, donde se puede encontrar desde DVD's piratas, hasta artesanías de todo tipo, dulces y comidas de todo tipo.
Tepotzotlánes una palabra de origen náhuatl que significa "entre jorobados", probablemente en alusión a que este lugar se localiza frente a unas elevadas montañas que semejan jorobas.
Los franciscanos iniciaron la evangelización en el siglo XVI, aunque a finales de éste le fue encomendado a los jesuitas catequizar a los hijos de la nobleza indígena. Se fundó entonces un noviciado y se comenzó la construcción del impresionante conjunto que albergaría al colegio; la obra se debió en parte a la gran ayuda que otorgó a los frailes un rico mercader llamado Pedro Ruiz Ahumada. El colegio estuvo activo hasta la expulsión de los jesuitas en 1767, cuando pasó a manos del clero secular; aunque el edificio volvió después a manos de los jesuitas, quienes lo abandonaron de manera definitiva en 1914. En nuestros días, esta estupenda construcción alberga al Museo Nacional del Virreinato.
Los dejamos con algunas fotillos de la recorrida por la capilla, el convento y el pueblo.
